Hoy recibimos un informe más del Poder Ejecutivo, el cuarto del sexenio, lo recibimos en un Querétaro cuya realidad es contrastante: desigualdad creciente, falta de acceso a servicios de salud, con limitada movilidad, un medio ambiente ofrecido como paraíso ambiental, familias ahorcadas por tarifas de agua, hogares ahogados por inundaciones pero colonias y comunidades sin agua, indígenas olvidados, mujeres que siguen enfrentando violencia y discriminación, delitos de alto y bajo impacto en crecimiento, comerciantes tratados como criminales, un gobierno endeudado, proyectos que se quedaron en papel y los que se realizaron no funcionaron, en fin muchas acciones que se informan, pero pocos resultados.

 

El gobierno ha presumido cifras y programas, pero en la vida diaria de miles de familias, la promesa de Querétaro a otro nivel aún no llega. El acceso a servicios básicos sigue siendo desigual entre municipios y comunidades. La política social del Estado es solo para unos cuantos, y está muy alejada de ser un derecho, por lo que no está resolviendo los problemas estructurales de pobreza, desigualdad y falta de oportunidades.

 

El Poder Ejecutivo queda a deber seguridad, ya que para los queretanos sigue siendo una preocupación central; no se sienten protegidos en sus hogares ni en sus calles. La violencia, tanto de género como comunitaria, sigue aumentando, mientras las políticas públicas solo son reactivas.

 

El Poder Ejecutivo queda a deber la igualdad territorial, ya que el desarrollo y la infraestructura no llegan a todos los municipios y colonias. Esto evidencia un modelo de gobierno que prioriza ciertos sectores y deja en el abandono a quienes más lo necesitan.

 

El Poder Ejecutivo queda a deber en materia económica a los pequeños comerciantes y pequeños emprendedores que sufren los efectos de cobros injustos y trámites engorrosos, mientras que el Estado se oferta en el mundo como un paraíso ambiental en donde las grandes empresas que en otros países no quieren, aquí encuentran todas las facilidades para instalarse, poniendo en riesgo la sustentabilidad del Estado.

 

El Poder Ejecutivo les queda a deber agua a las y los queretanos, ya que propuso solo un proyecto sin viabilidad técnica, financiera, jurídica y con un gran rechazo social, sin presentar al momento el programa hídrico estatal como la hoja de ruta para resolver el problema del agua, pero de manera integral, con visión de derecho y o de negocio

El poder ejecutivo le queda a deber a la presidenta Claudia Sheinbaum, porque mientras la recibe con los aplausos, su partido no ha permitido que ninguna de sus reformas constitucionales sea aprobada en el estado, y se adecue la constitución y leyes locales a la transformación del país.

 

El Poder Ejecutivo les queda a deber a los queretanos un gobierno cercano, cálido y eficiente. El “contigo” de la publicidad, solo oculta un gobierno que se conforma de unas cuantas familias, de unos cuantos apellidos; a esta oligarquía sirve, porque a ella se debe.

 

Por estas y otras muchas razones, decimos con claridad que este gobierno le está quedando a deber a las y los queretanos.

 

Los discursos y las cifras no sustituyen la experiencia diaria de la ciudadanía; y mientras las personas sigan enfrentando estas desigualdades, la administración estatal no puede hablar de éxito ni de avances reales. El verdadero informe, el que importa, es el que vive la gente en sus barrios, en sus escuelas, en sus trabajos y en sus hogares.

 

Señor gobernador, aún faltan dos años, no se canse, no se desanime, la política no es para sufrir, es para lograr acuerdos; trabajemos lo que nos resta de nuestros períodos en dejar un Querétaro mejor que el que recibimos, dediquemos nuestro esfuerzo.

 

* A la creación del Sistema Estatal de Cuidados, que reconozca a quienes cuidan y a quienes requieren cuidados, con dignidad y derechos.

 

* A impulsar una justicia fiscal, con tarifas de agua justas, con distribución equitativa de recursos y eliminando cobros ilegales que afectan a comerciantes y ciudadanos.

 

* A garantizar una procuración de justicia cercana, protegiendo a nuestras infancias, sancionando el acoso, la violencia digital y la violencia política contra las mujeres.

 

* A fortalecer las políticas de igualdad sustantiva, para que las mujeres y los grupos históricamente discriminados tengan las mismas oportunidades.

 

* A proteger a trabajadores de la educación, a reconocer derechos de pueblos indígenas y afromexicanos, a trabajar en favor del medio ambiente, los derechos humanos y el bienestar animal.

 

* A reformar al Poder Judicial, buscamos un sistema más cercano a la gente, más transparente y que responda al mandato democrático de la ciudadanía, para acabar con la percepción de que la justicia se compra o se negocia.

 

* A cerrar las puertas al nepotismo electoral y a la corrupción, porque Querétaro merece instituciones transparentes y democráticas.

 

Hoy no basta con discursos triunfalistas ni promesas vacías; la ciudadanía exige resultados concretos. Por ello, invitamos al gobierno a trabajar de la mano con esta Legislatura, escuchando y atendiendo las verdaderas necesidades de las y los queretanos. Hagamos política de la buena: la que construye soluciones, que abre caminos y no levanta muros, la que actúa con honestidad y prioriza el bienestar de la gente sobre los privilegios de unos cuantos.

 

Querétaro no puede seguir siendo un estado de contrastes, donde unos pocos se benefician mientras la mayoría espera. Como oposición responsable, levantamos la voz, señalamos las carencias y proponemos alternativas. Nuestro compromiso es claro: sumarnos a acuerdos que transformen la vida de las y los queretanos, construyendo juntos un gobierno más cercano, justo e incluyente.

 

“Porque un gobierno no se mide por los discursos, sino por la vida diaria de su gente; y mientras haya queretanas y queretanos esperando justicia, igualdad y bienestar, nuestra labor seguirá siendo exigir, proponer y construir un futuro digno para todas y todos.”

 

Diputada Claudia Díaz Gayou